Adiós al malestar de las piernas gracias al árnica
Redactado y escrito por Eddie Cabrera J.
Nuestros huesos y músculos son la verdadera estructura de nuestro cuerpo. Día a día esta estructura es sometida constantemente a esfuerzos que nos exigen lo mejor de nuestros músculos.
La vida sedentaria, el exceso de peso, la mala alimentación pueden causar estragos en nuestro sistema osteomuscular. Desde hace treinta años se ha elevado en un 70% las consultas referentes al lumbago y a la ciática en adultos menores de 40 años (fuente instituto nacional de estadísticas). Los síndromes crónicos de dolor de espalda se han vuelto una causa frecuente para solicitar licencias y los síndromes de dolor crónico laboral (tunel carpiano, síndrome de manguito rotador doloroso, tendinitis, etc.) se han instalado como enfermedades frecuentes en las personas que realizan trabajos sedentarios. Es decir, a parte del cansancio diario, se debe lidiar con el dolor muscular.
Pero eso no es todo, también las personas que llevan vidas activas, se encuentran con problemas en el sistema osteomuscular. Desde el año 2000, el porcentaje de personas que asisten diariamente al gimnasio se ha elevado desde un 2.8 % a un 25% de la población latinoamericana (fuente americasana). Este aumento en el uso de nuestros musculos, sin una supervisión médica adecuada y sin un trabajo nutricional, ha creado individuos doloridos que no poseen una buena respuesta osteomuscular o en su defecto han desarrallodo grandes masas musculares y han perdido por completo su flexibilidad.
Ahora bien, no solo los adultos pueden tener problemas musculares, los niños y los ancianos tambien los padecen. Los niños se ven afectados por las constantes magulladores y moretones, que se producen al recibir golpes o caídas, casi siempre estos moretones son leves, pero pueden ser dolorosos al día siguiente. En el caso de los ancianos, el dolor se focaliza en las articulaciones, con diversos tipos de síndromes dolorosos, relacionados con el reumatismo, la artritis y la artrosis.
Para todos estos males del sistema locomotor, existe una planta que posee propiedades mágicas: el árnica. El árnica es una planta que crece en américa del norte y fue bautizada árnica (piel de cordero) debido a la suavidad de sus hojas. Existen diversos tipos de árnica, pero el más usado es el árnica montana. Esta maravillosa planta, rica en aceites esenciales y taninos, posee propiedades desinflamatorias y analgésicas, asi como vasodilatadoras (favorece la circulación). Su aceite esencial es rico en timol, un aldehído que actúa como bloqueador de los neurotransmisores del dolor. Es usada en homeopatía para aliviar todo tipo de traumatismos y en postoperatorios, elimina casi inmediatamente los moretones y favorece el flujo de sangre venoso, por lo cual alivia las várices.
Esta maravillosa planta ha sido combinada con la flor de Edelweiss para crear el maravilloso Bálsamo corporal Just. Una fricción vigorizante estimula la circulación evitando la formación de moretones. Esta combinación de extracto de árnica junto a exquisitios ingredientes activos naturales, protege la piel de agresiones externas reconfortando y minimizando las molestias causadas por golpes y picaduras de insectos. Idealpara niños, mas propensos a golpearse y formar hematomas. Este mes, Just lo tiene en oferta para ti.
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